¿Sabías que Grecia y Rusia siguen el antiguo calendario ortodoxo y la Navidad se celebra unas dos semanas después que en los países que utilizan el calendario gregoriano? En todo el mundo se celebran las festividades de acuerdo a las tradiciones de cada pueblo. La Navidad en los países hispanohablantes une a las familias y renueva la fe en la humanidad.
En México, por ejemplo, las celebraciones comienzan el 16 de diciembre, fecha que marca el inicio de las nueve posadas. Según la tradición mexicana, las posadas representan a María y José buscando un lugar donde quedarse y prohibiéndoles la entrada en cada oportunidad.
Luego son bienvenidos en la posada final, donde celebran una gran fiesta. Cada año cientos de familias ofrecen su hogar para la tan esperada celebración, que continúa en Nochebuena con una cena especial y una misa a medianoche.
Asimismo, los mexicanos celebran la Epifanía, que es un día de celebración y disfrute de un delicioso pastel especial llamado Rosca de Reyes. En su interior contiene una pequeña figura del Niño Jesús y quien la encuentra se convierte en el padrino de Jesús durante ese año. La temporada festiva culmina el 2 de febrero con la fiesta patronal de la Virgen de la Candelaria.
Distintas costumbres con una misma esencia
En Argentina y España la temporada navideña comienza el 8 de diciembre durante la festividad de la Inmaculada Concepción. La tradición de Los Seises se celebra puntualmente en Sevilla, que literalmente significa “el baile de los seis” y hace referencia a que en tiempos pasados había seis jóvenes en el coro de cada Iglesia y eran ellos quienes protagonizaban la danza.
En Nochebuena la cena de los españoles incluye pavo con relleno de trufas, pescado y mariscos dependiendo de la zona y, como en la mayoría de los países de habla hispana, a medianoche se acostumbra ir a la Iglesia para celebrar una misa. El 6 de enero, día de Reyes Magos, los niños ponen sus zapatos en las ventanas para recibir los regalos.
Mientras que en Argentina acostumbran a colgar un calcetín rojo en la puerta de cada casa. La reunión en familia es el momento más esperado del año. En algunas regiones del norte del país se crea el pesebre con pequeñas figuritas.
Por su parte, en la Ciudad de Buenos Aires y La Plata, los vecinos crean un muñeco enorme de paja; a este lo llaman “Año Viejo”, y lo queman al recibir el nuevo año.
Otras formas de celebrar la Navidad en los países hispanohablantes
En Colombia, el tradicional alumbrado navideño de Medellín fue considerado por la revista National Geographic como uno de los 10 más sorprendentes del mundo. La Navidad en los hogares colombianos inicia el 7 de diciembre en el Día de las Velitas, en el cual se recuerda la iluminación de Dios a la Virgen María.
En Medellín, para conmemorar esta tradición, se colocan luces a lo largo del río; mientras que en Barranquilla y Bogotá se adornan las calles con velas. Entre los platos típicos que destacan durante esta temporada mencionaremos el ajiaco santafereño, la lechona, la natilla y los buñuelos.
En Venezuela la temporada navideña se celebra desde el 4 de diciembre, día de Santa Bárbara. Los venezolanos decoran sus hogares con mucha alegría y celebran la Nochebuena en compañía de sus seres queridos.
En este país suramericano también se celebra el 21 de diciembre, día del Espíritu de la Navidad. Entre los rituales de este día destacan el encendido de velas e infusiones, que significan prosperidad para el año nuevo. Los regalos, son entregados el 24 de diciembre a la medianoche; tras una cena especial con hallacas, cerdo, dulce de lechosa, entre otros platos tradicionales.
Papa Noel, Niño Jesús, San Nicolás son algunas formas que adoptan los pueblos de habla hispana para celebrar la Navidad; y así llevar alegría a los más pequeños de la casa, y a los más grandes también. En fin, en Latinoamérica y todo el mundo la Navidad sin duda alguna representa tradición, valores y familia.
Por Andreina Ibarra
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