El uso de las tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial (IA), es una estrategia potencial e innovadora para los procesos de enseñanza y aprendizaje que supone oportunidades y desafíos. Esta demanda digital implica que el maestro debe asegurarse de que la IA se utilice de manera responsable y ética en la sala de clases. En este artículo queremos compartir algunos de los desafíos y oportunidades para los maestros en un mundo con inteligencia artificial.
DESAFÍOS
- Formar ciudadanos digitales competentes y capaces de analizar correctamente la información que ofrece el mundo digital y, su vez, que asuman posturas éticas en el buen uso y manejo de estas herramientas tecnológicas.
- Evitar la dependencia tecnológica, es uno de los grandes desafíos. El uso excesivo de la inteligencia artificial en proyectos y/o tareas puede hacer que los estudiantes pierdan sus habilidades cognitivas para la toma de decisiones, resolver problemas y aplicar el pensamiento crítico en algunas áreas académicas.
- La vulnerabilidad en la privacidad y seguridad de los datos en los sistemas digitales es un factor de riesgo que los maestros deben tomar en consideración cuando utlilicen la IA en la sala de clases. Se necesita consolidar más medidas sólidas de políticas de privacidad para proteger la información sensible de los maestros y estudiantes.
- Detectar la autenticidad de un trabajo académico es uno de los mayores retos docentes. Existe una preocupación apremiante en torno al uso del ChatGPT, ya que los estudiantes pueden generar ensayos y trabajos escritos con inteligencia artificial.
OPORTUNIDADES
- La IA ofrece una experiencia de aprendizaje personalizada. Los algoritmos de la inteligencia artificial tienen la capacidad de analizar los datos de los estilos e intereses de aprendizaje. Esto le permite generar un aprendizaje personalizado más atractivo e interactivo para cada estudiante.
- Facilita la inclusión educativa adaptando el aprendizaje a las necesidades individuales de cada estudiante. Como ya habíamos mencionado, los algoritmos de la IA pueden identificar las áreas de necesidad cognitiva y proporcionar recomendaciones específicas para ofrecer materiales de aprendizaje en formatos diferentes que se pueden adaptar a las necesidades individuales.
- Optimiza el tiempo del maestro facilitando la organización y planificación educativa. Entre las oportunidades de apoyo que ofrece la inteligencia artificial al maestro se encuentran: la creación de rúbricas y presentaciones en corto tiempo, editar imágenes y fotos, obtener resúmenes de artículos académicos, juegos interactivos de aprendizaje, etc.
- Fomenta el aprendizaje activo y colaborativo en los estudiantes. La inteligencia artificial facilita el trabajo colaborativo mediante el uso de plataformas digitales que ofrecen retroalimentación de evaluación automatizada.
En fin, la inteligencia artificial (IA), utilizada correctamente, tiene el potencial de transformar el salón de clases en un espacio de enseñanza y de aprendizaje activo, lúdico e inclusivo.
Por Linda Ojeda
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