Por- Linda Ojeda
Con frecuencia las lenguas suelen utilizar palabras o expresiones lingüísticas de otros idiomas. La incorporación de estas palabras o expresiones se debe a sucesos históricos y la integración de diversas culturas y etnias en un país determinado. A esos vocablos que tomamos de otras lenguas se les conoce como extranjerismos. La Real Academia Española define el término extranjerismo como préstamo, especialmente el no adoptado.
Sin embargo, con el uso frecuente del hablante algunos de estos vocablos han sido aceptados y daptados a las nuevas normas. La Nueva Ortografía del Español establece que los extranjerismos crudos se deben escribir en cursiva o entre comillas (beige, “hobby”), no así, los extranjerismos adaptados, que deben escrirse en letra redonda normal siguiendo las reglas generales de acentuación (magacín). Dependiendo su origen de procedencia los extranjerismos se clasifican en: indigenismos o americanismos, africanismos, italianismos, anglicismos (del inglés), galicismos (del francés), lusismos o lusitanismos (del portugués) y germanismos (del alemán).
Actividades:
#1- Adivina de donde provienen los siguientes extranjerismos adaptados por el Diccionario de la Academia Española, luego realiza una investigación para verificar tus respuestas. Discute los resultados con tus compañeros de clase.
Palabra | Lo que pienso | Lo que investigué |
afiche | ||
malanga | ||
pizza | ||
estrés | ||
lasaña | ||
hotel | ||
menú | ||
guerra |
#2-Realiza una tirilla cómica en la que incorpores algunos extranjerismos.
#3- Entrevista a un conocido acerca de cualquier tema de interés social. Anota todos los extranjerismos que la persona mencionó durante la conversación. Comparte los resultados con otros compañeros de clase.
Recuerda, las aportaciones léxicas procedentes de otros idiomas enriquecen la lengua que hoy hablamos.